Penitencia hermanos pecadores

El pasado 26 de enero celebramos el Día Mundial de la Educación Ambiental. Por esta razón he recordado que los primeros versos de la canción de Cri Cri, La patita, siempre me han gustado para realizar el audio promocional de una campaña que motive a dejar de lado el uso de las bolsas plásticas que nos ofrecen en las tiendas.

Y es que nuestro uso irracional, raya en un abuso de caras consecuencias: menos del 1% de las bolsas que usamos se reciclan, pues cuesta más barato desde el mezquino punto de vista económico, producir una nueva. Sólo recuerde la más reciente ocasión en que compró frutas o verduras, seguro que cada variedad la embolsabas de manera individual para llevarla a la báscula. A la hora de pagar, eso terminó en una bolsa plástica aún más grande, y todas ellas en un brevísimo lapso de tiempo acabaron en la basura. El hecho que nos hayan costado tan poco dinero, no quiere decir que no sea alto el precio de usarlas.

Se requiere voluntad para comenzar a descontaminar nuestro espacio. Por lo pronto, ya tengo mi bolso permanente para compras y comienzo a hacer costumbre su uso. A veces lo olvido, pero si la compra es pequeña y manejable prefiero llevarla en las manos. De esta manera, según mis conservadores cálculos, si elimino de mi uso una nueva bolsa plástica por día, ahorraría siete bolsas a la semana, por lo menos veintiocho al mes y mínimo trescientos sesenta y cinco al año. En una década, sólo esta Eva excluiría a la tierra de la contaminación de por lo menos tres mil seiscientos cincuenta bolsas… ¿cuántas más si lo hacemos juntos?

Hace tiempo, la ciudad de San Francisco, California, calculó que anualmente utilizaba un promedio de doscientos millones de bolsas de plástico, lo cual se traducía en tres millones de litros de petróleo necesarios para su producción y el transcurso de mil años para disolver su poder letal. Ahora, si en Tamaulipas de acuerdo con el Conteo de Población realizado en el 2010, somos aproximadamente un poco más de 3 268 554 habitantes… y todos prescindiéramos por lo menos de una bolsa por día, estaríamos quitándole cerca de cien millones de residuos tóxicos por mes a nuestro estado.

Requerimos reglamentaciones nacionales y locales más determinantes para combatir tan sólo la plaga de las bolsas de plástico.

Posdata del pecado social cometido: El Cardenal Gianfranco Girotti, regente del Tribunal de la Penitenciaría Apostólica del Vaticano, presentó el 10 de marzo de 2008, una nueva lista de pecados cuya denominación es Pecados Sociales. Al parecer los clásicos siete pecados capitales, enlistados hace mil cuatrocientos años por el Papa Gregorio I, nos estaban quedando cortos en la actualidad.

Y precisamente condena como la cuarta nueva ofensa a Dios, usar indiscriminadamente bolsas plásticas. Bueno, con más exactitud la cuarta sentencia en sí reza: No contaminarás el medio ambiente.

Hermanos pecadores, yo les propongo hacer penitencia y no usar por lo menos una bolsa plástica al día.

Columna publicada en el periódico Expreso de Cd. Victoria y La Razón de Tampico, Tamaulipas. 

Portales electrónicos: Gaceta.mx y La Región Tamaulipas.
 Publicado el  31 de enero,2013..