lunes, 1 de diciembre de 2008

Sofisticada Diva

Luego de cuatro horas era probable que despertara pidiendo más leche. Así que por lo menos le daba una toma de madrugada y otra muy temprano en la mañana.
Las noches del Otoño suelen ser frías en Cd. Victoria. Para calentarme preparaba un té de manzanilla y para no aburrirme me gustaba escuchar la versión de Usted abusó mientras la amamantaba:
Perdone usted que tanto insista en este tema, pero no se hacer poema, ni canción que no hable de otra cosa que no sea de amor. Si la simpleza de mis versos pueda herir al intelecto y dale también con las otras once maneras de asombrerarse. Hacía apenas unos meses que por mi cumpleaños Víctor Hugo me había regalado las Doce maneras de ponerse un sombrero de Miguel Bosé.



Ahora que se acercaba su cumpleaños, llenaron la ciudad con pendones anunciando el concierto en el nuevo Centro de convenciones de Tampico. No importa que no tenga fiesta, me dijo. Quiero ir a ver a Miguel Bosé hasta adelante. Así que el doce de noviembre, apenas estrenando nueve años, su padre y yo la llevamos a celebrar con el Papitour en la zona VIP del recién estrenado recinto. Los boletos nos parecieron costosos, pagamos más de dos mil pesos por cada uno, de hecho fue de las plazas más caras en la república. En el Foro Sol de la Ciudad de México, por ejemplo, el boleto de más precio llegaba a los 1 800 y en el Complejo Siglo X X I de Puebla sólo 1 350. El evento por acá, según se anunció fue a beneficio de la Fundación ALE, que tiene el propósito de promover la donación de órganos en Tamaulipas. Pero al entrar al lugar daba la impresión que otros también necesitaban recapitalizarse a la brevedad posible para terminar las instalaciones del lugar. El espacio era un huacalón desangelado con unas tristes sillas de vinil negro acomodadas en filas ordinarias a un mismo nivel del piso y unas gradas móviles tipo circo, lejanas del escenario. El espectáculo comenzó casi una hora después de lo anunciado, luego de que nuestra glamorosa siempre bella primera dama y su séquito tomaron asiento.
Lo fuerte de la música le impresionó al principio, pero de a poco se fue sintiendo segura y cuando Miguel cantó su canción favorita: Nada Particular, ella lo acompañó de PE a PA:
Dame una isla en el medio del mar, llámala Libertad. Canta fuerte hermano, dime que el viento no, no la hundirá…
El concierto estuvo ENORME como los treinta años de éxito de Bosé, los otros asistentes al igual que ella estábamos contentos, tan contentos que los aplausos y la alegría hicieron prolongar el concierto y conceder algunos temas más y otros más... a esas alturas ya nos habíamos olvidado de la condiciones del recinto y estábamos completamente seducidos.
Unas semanas después me han contado que el Centro de Convenciones lucía espléndido en el informe del gobernador, que el trabajo en esos días debió de ser maratónico, pero como no asistí no tengo punto de comparación así que... será en la próxima para variar y espero me salga más barato.
Fotografía tomada de la portada del disco Papito de Miguel Bosé

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.