Decía el finado Paco Stanley… una tras otra… ¿Se acuerdan? Pues entre muchas, esta frase le viene ahora como anillo al dedo al presidenciable Peña Nieto. No acabamos de carcajearnos con las bromas por sus desatinos cuando sin esforzarse tanto, nos vuelve a sorprender con uno más. El tuitómetro podría distinguirlo con el galardón de la temporada.
Como buenos mexicanos, hemos hecho guasa. La panza nos ha dolido, se nos salieron ya hasta las lágrimas… ¡Esa manera tan nuestra de celebrar la desgracia! ¿Por qué un país de no lectores se burla hasta el escarnio de un postulante no lector? ¿Será que buscamos equilibrio? ¿Por qué ante la falta de sensatez que nos agravia sonreímos? ¿Somos la prole, quienes en mente de quien se sueña gobernante hacemos la vida mensual con menos de mil pesos, "La bola de pendejos "?
Lo bueno de esto es que el verdadero hombre tras el marketing político se asoma en sus declaraciones espontáneas y nos permite conocer su esencia sin maquillajes ni retórica para la ocasión. Lo malo es que con el alto rating mediático de sus dislates, los yerros de sus oponentes pueden pasarnos desapercibidos. La campaña rumbo a Los Pinos barrunta más caídas espectaculares que el show televisivo “Resbalón”… ¿Los contendientes jugarán a muerte súbita?
En realidad la jornada dura aún no inicia, horas muy difíciles se avecinan para los asesores de imagen de quien irá por el PRI. Las flechas envenenadas buscarán dar por la parte más endeble, y mantener así, la función de descredito encendida. El virtual candidato, Enrique, ya mostró su talón de Alquiles.
Columna publicada en el periódico Expreso de Cd. Victoria y La Razón de Tampico, Tamaulipas.
Portales electrónicos: Gaceta.mx y La Región Tamaulipas.
ASÍ LLEGÓ AL BUZÓN:
ResponderEliminarGracias Celeste por tus reflexiones. Es preocupante la muestra de incultura del virtual candidato, que manifuiesta su hechura frágil apoyada por padrinazgos políticos y televisivos. También que nos riamos tanto que hasta resulte simpático a las mayorías que poco reflexionan. A fin de cuentas se ha vuelto un entretenimiento gratuito, una fuente de diversión que distrae de aspectos más importantes de él y otros aspirantes. A fin de cuentas no es una campaña de odio como la que vimos -y ya empieza a asomar nuevamente- contra López Obrador, quizá resulte una "anticampaña que reditúe bonos a favor de peña... Todo es posible en este país surrealista.
Abrazos de año nuevo para los cuatro.
beatriz Bonfil